Columna de José Enrique Fernández publicada originalmente en El Nuevo Día.
Fue el pasado 10 de abril, un viernes Santo y en medio de la cuarentena, que nos enteramos de la decisión del Primer Circuito de Apelaciones Federal de Boston, que resolvió que era Inconstitucional excluir a los residentes de Puerto Rico del Seguro Social Suplementario (SSI). El dictamen reafirmó la decisión del Juez Gustavo Gelpí tomada en el 2019, referente al caso del señor José Luis Vaello Madero.
Desde su implementación en el 1972, el Seguro Social Suplementario, excluyó a Puerto Rico para recibir este beneficio en un acto completamente discriminatorio e inconstitucional.
Finalmente, esta determinación reconoce el Derecho a la igual protección de las leyes, protegido por la Constitución de los Estados Unidos y de la que los puertorriqueños somos parte. Esto sin lugar a duda marca un precedente a favor de nuestros derechos como ciudadanos. Ahora es nuestro deber conocer claramente nuestras realidades para exigir la igualdad de nuestros derechos. Aquí nuestra realidad:
- Aproximadamente 1,724,760 personas en Puerto Rico viven bajo el nivel de pobreza. Esta cantidad correspondiente al 46% de la población. Compárese con el 11% para todos los Estados Unidos, y el 19.7% en Mississippi considerado el estado más pobre de la nación. Nuestros niveles de pobreza son absurdamente elevados.
- Si fuéramos a medir el nivel de pobreza por cada municipio individualmente, veríamos tasas de hasta el 70% bajo el nivel de pobreza en Puerto Rico.
Pero, en mi opinión, lo que más afecta a Puerto Rico es que muchos programas federales que proveen beneficios o ayudas sociales y económicas, o NO son aplicables en Puerto Rico o proveen beneficios limitados, menores o sujetos a un máximo, contrario a como se tratan a los residentes y ciudadanos en los Estados, e inclusive en algunos territorios no-incorporados como Puerto Rico.
Por ejemplo, se ha estimado que, si Puerto Rico recibiera todos los fondos que le corresponden, en paridad con los Estados, tendríamos las siguientes sumas anuales adicionales en estos tres (3) programas federales solamente:
- Programa Seguro Social Suplementario (SSI): $1.65 billones
- Este programa, de ser aplicable a Puerto Rico, proveería aproximadamente entre 305,000 – 354,000 personas elegibles. Lo que significaría que estas personas podrían recibir una ayuda adicional hasta $783 dólares mensuales por individuo y hasta $1,175 dólares mensuales por familia. Como dato curioso, las Islas Marianas del Norte, otro territorio no-incorporado como Puerto Rico, recibe aproximadamente $525.69 mensuales por beneficiario.
- Programa PAN: $1.25 billones
- Programa Medicaid: $1.6 billones
- Total, de beneficios anuales de estos programas = $5.30 billones
Esto, ¿les parece justo?… Es momento de exigir nuestros derechos como ciudadanos americanos.